Arropados por los alcaldes, legisladores, dirigentes municipales de su partido y más de dos mil simpatizantes, Alejandro Bravo Abarca y Pilar Vadillo Ruiz se registraron el lunes como candidatos a la Presidencia y Secretaría General del Comité Directivo Estatal del PRI.
Durante su mensaje y luego de entregar la documentación respectiva a la Comisión Estatal de Procesos Internos, Alejandro Bravo se comprometió a unificar a los priistas, renovar el partido y abrir las puertas a los liderazgos juveniles. Y no sólo eso. También hizo un reconocimiento a Mario Moreno Arcos, ex candidato a la gubernatura en la pasada elección.
Al no registrarse otra fórmula, lo que procede es que en los próximos días las consejeras y consejeros políticos ratifiquen en una Asamblea Estatal como ganadores a los candidatos de la fórmula que se registró y cumplió con los requisitos estipulados en la convocatoria emitida el pasado 25 de marzo.
Horas antes de que Alejandro Bravo se registrara para contender por la dirigencia estatal de su partido, Mario Moreno anunció a través de su página oficial de Facebook que no acudiría a la sede estatal para registrarse “por falta de condiciones y de piso parejo” en la contienda.
Aclaró a sus simpatizantes y a los priistas que la decisión que tomó no es producto de un arranque o capricho, sino al contrario, “es el resultado de muchos silencios que decían más que mil palabras, y de muchos movimientos incomprensibles o quizás demasiados claros que val vez me negaba a ver y menos aún a creer”.
Desde un principio fue más que evidente que Alejandro Bravo era el gallo de los grupos políticos más fuertes al interior del tricolor y que a Mario Moreno le cerrarían el paso. Y este lunes se confirmó.
Hay quienes señalan que los ex gobernadores Héctor Astudillo Flores y Rubén Figueroa Alcocer ‘chamaquearon’ a Mario Moreno, ya que le prometieron después de las elecciones del año pasado que lo apoyarían para suceder a Héctor Apreza Patrón en la Presidencia del CDE del PRI.
Mario Moreno era el candidato natural de los militantes de base, pero se confió demasiado de la cúpula de su partido. Y las consecuencias ahí están. No será dirigente del PRI. Se la volvieron a hacer.
Y, aunque sostuvo que no se irá del PRI, también manifestó que la vida se encargará de brindarle nuevas rutas, para seguir trabajando en canales sólidos establecidos “con el cariño de mucha gente que me fortalece y obliga”.
Si Alejandro Bravo busca realmente la unidad de su partido, está obligado a sentarse con aquellos priistas que no comparten su proyecto político, porque no solamente es Mario Moreno, sino más personajes que han ocupado importantes responsabilidades públicas.
El PRI no la tiene fácil en las elecciones de 2024. Y no hablo solamente en el ámbito nacional. En lo local, Alejandro Bravo y Pilar Vadillo tendrán mucho qué hacer.
Ojalá recorran nuevamente al estado y reestructuren los Comités Municipales, porque el actual dirigente (Héctor Apreza) se la llevó de a muertito. De hecho, fue un dirigente alejado de las bases y que solamente utilizó el cargo para auto palomearse como diputado local plurinominal.
Qué bueno que Alejandro Bravo no es un político que le apuesta a la confrontación ni al revanchismo político. Durante toda su trayectoria política se ha manejado con bajo perfil. Pero también hay que decirlo: es un priista que ha ganado tres elecciones (Presidencia Municipal de Petatlán/1996, Distrito 12 de Zihuatanejo/1999 y Presidencia Municipal de Zihuatanejo/2008) y que ha sido siempre leal a su partido.
Estaremos atentos del papel que realice junto con Pilar Vadillo durante los próximos cuatro años para el que serán electos en una Asamblea Estatal por las consejeras y consejeros políticos.
ENTRE OTRAS COSAS… La que solicitó licencia haces unos días como diputada local por el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), es Beatriz Mojica Morga, quien se ha sumado a la promoción de la consulta de Revocación de Mandato en la entidad.
A través de su página de Facebook, la también ex candidata a la gubernatura en 2015, dio a conocer su decisión con el siguiente texto:
“En la recta final de la Consulta Ciudadana para la Revocación de Mandato, decidí pedir licencia como Diputada del Congreso de Guerrero, para concentrarme en promover intensamente este ejercicio democrático”.
Desde luego que Mojica Morga apoya la continuidad de Andrés Manuel López Obrador como presidente de la República, lo cual es respetable, aunque en 2018 haya apoyado al panista Ricardo Anaya Cortés para la primera magistratura del país.
Diría Don José José: “Ya lo pasado, pasado…”
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